10.3.12

Ahora entendemos por qué la afirmación de que estos sistemas son inestables y siguen existiendo no es contradictoria. Basta que en ellos los intercambios entre todas las partes sean lo bastante rápidos como para que la dimensión crítica a partir de la cual la fluctuación puede amplificarse y destruir el sistema sea enorme, y por lo tanto su posibilidad muy reducida, de manera que el sistema puede persistir durante tiempos prolongados. En este sentido, podemos considerar que ninguno de los sistemas que conocemos es realmente estable, sino solamente metaestable, y que vive debido a que pocas perturbaciones son capaces de superar su "poder de integración", pero que en ningún caso su existencia es prueba de la armoniosa estabilidad cerrada sobre sí misma que, por ejemplo, algunos análisis funcionalistas en sociología querrían presentarnos como el estado ideal a alcanzar.
Lleguamos, por consiguiente, a la idea de sistemas de evolución indefinida, al concepto de que, por definición, ningún sistema complejo es jamás estructuralmente estable. Desembocamos en la imposibilidad de hablar de final de la historia, sino sólo de fin de historias. En definitiva, llegamos a una concepción bastante próxima al Eterno Retorno, en el sentido de que la doble crítica de Nietzsche -a la termodinámica y a la mecánica- podía hacernos entender. Imposibilidad de hablar de una evolución finalizada hacia un estado estable, un estado en el que "el futuro ya no sea peligroso". Evolución que deja de ser búsqueda de identidad, de reposo, para hacerse creación de problemas nuevos, proliferación de nuevas dimensiones. La innovación hace más complejo el medio en el que se produce, planteando problemas inauditos, creando nuevas posibilidades de inestabilidad y conmoción. También nos unimos a esa idea de Whitehead en la que afirmaba que todo lo que existe se crea, unificando el medio desde su punto de vista, si bien, al unirse a ese medio, aumenta su complejidad u multiplicidad para quienes, a continuación, vayan a crear una nueva síntesis: The many become one and are increased by one.

Ilya Prigogine
Naturaleza y creatividad